jueves, marzo 01, 2007

Anecdotas con final abierto

Una vez fui a una entrevista donde me pidieron que en una hoja en blanco dibuje un animal y redacte una historia donde el animal sea el protagonista.
Decidí dibujar un pájaro. A pesar de mis mejores esfuerzos, el pajaro quedó con una cabeza 2 o 3 veces mas grande que el resto de su cuerpo.
Al momento de redactar la historia no se me ocurrio nada mejor que contar la historia de un pájaro que quería mejorar sus habilidades de caza, y para ello recurrió a leer toneladas de libros. Como resultado su cerebro creció un tamaño descomunal, lo cual le impidió volar de ahi en mas, por tener cabeza muy pesada, y murió de hambre.

Todavía me pregunto si no me habrán dado el trabajo por ser DEMASIADO creativo, o por la pequeña moraleja oculta de: "LEER NO SIRVE PARA NADA".

O a lo mejor que llené mal un formulario, quien sabe?

3 comentarios:

Simon Erusalimsky dijo...

jajaj, yo diria por delirante... sin saberlo, eso es muy similar a un chiste de Quino, de un tipo q se la pasa leyendo mientras le crece la cabeza, y en un momento dice: "Listo ya se TODO lo que existe" y despues la cabeza no le pasa por la puerta

Leber dijo...

Ok. Quino fue quien me tomo el test.

Anónimo dijo...

Pues...psss..según el trabajo que buscaras.. podrían sacr unas conclusión u otra supongo. De imaginación no está mal.. je. zarek_2000@yahoo.es